La capital de la provincia, Halifax, es un importante puerto marítimo y centro cultural, con numerosos museos, teatros y eventos artísticos. Nueva Scotia es famosa por su música celta y sus festivales, que reflejan la influencia de los colonos escoceses e irlandeses.
La provincia cuenta con numerosos parques y reservas naturales, como el Parque Nacional Cape Breton Highlands y el Parque Provincial de Kejimkujik. Nueva Scotia es un importante productor de mariscos, especialmente langosta, y su gastronomía se centra en productos del mar frescos.
La economía de la provincia se basa en una combinación de pesca, agricultura, turismo y tecnología. El sistema de transporte incluye carreteras, trenes y ferris que conectan con el resto de Canadá y las islas circundantes.